Existe una gran variedad de cremas y tónicos para reafirmar el busto, pero la naturaleza sabia y rica en opciones, también ofrece sus productos para este fin. Isabella te comparte algunos consejos prácticos, caseros y naturales para recuperar la firmeza de tu busto -para combatir su flacidez- y mantener su bienestar.
Ejercicio
El ejercicio diario es uno de los mejores tratamientos para levantar el busto dado que fortalece los tejidos mamarios y los músculos alrededor del pecho. Entre los ejercicios para senos caídos están presionar y empujar el pecho, el levantamiento de brazo y pectorales, y las rutinas.
Masaje con hielo
Se considera muy eficaz para recuperar la firmeza de los senos caídos pues el frío contrae los tejidos, lo que hace que los senos se muestren más firmes y levantados.
Lo ideal es masajear los senos con hielo por no más de un minuto (un tiempo mayor los entumece) realizando movimientos circulares en cada uno. Luego secarlos con una toalla suave, colocarse inmediatamente el brasier y, de ser posible, permanecer en posición reclinada por 30 minutos.
Aceite de Oliva
Un aliado en este propósito es el aceite de oliva cuando se utiliza para masajes, dado que es una fuente rica de antioxidantes y ácidos grasos que ayudan a revertir el daño causado por los radicales libres mientras mejora la textura y tono de la piel.
Para su uso: Poner un poco de este aceite en las palmas de las manos y frotarlas para generar calor, luego frotarlas sobre los senos en movimientos suaves y ascendentes por 15 minutos para aumentar el flujo de sangre y estimular la reparación celular; un procedimiento recomendable realizar de 4 a 5 veces por semana.
Pepino y yema de huevo
El pepino tiene propiedades naturales para tonificar la piel y la yema de huevo, altos niveles de proteínas y vitaminas que ayudan a tratar los senos caídos, por eso aplicar una mascarilla con estos ingredientes –una vez por semana- resulta muy efectivo.
Para prepararla sólo hay que licuar un pepino pequeño, mezclarlo con la yema de huevo y una cucharadita de mantequilla orgánica o crema de coco. Luego se aplica la pasta y se deja actuar por 30 minutos y se retira con agua fría.
Clara de huevo
Gracias a sus lípidos hidroeléctricos, este ingrediente tiene propiedades astringentes y nutrientes que ayudan a levantar la piel flácida
Para obtenerla, se bate una (1) clara de huevo hasta lograr una textura espumosa y se aplica luego en los senos dejándola reposar por 30 minutos. Se retira con jugo de pepino o de cebolla y agua fría.
También se puede agregar a la clara de huevo, una cucharada de yogur natural y miel y se enjuaga con agua fría. Ambos tratamientos deben aplicarse al menos dos veces por semana para obtener resultados.
Fenogreco
La alholva o fenogreco es una planta de origen asiático con una importante concentración de vitaminas y antioxidantes que -convertida en pasta (con agua la adición de agua) y puesta sobre los senos por máximo 10 minutos- combate los radicales libres y dan a la piel suavidad y firmeza
El secreto es masajear el busto con una pasta formada por un ¼ de taza de polvo de fenogreco mezclada con agua, al menos dos veces por semana. También se puede hacer el emplaste con 10 gotas de aceite de fenogreco, 1/2 taza de yogur y aceite de vitamina E, aplicarlo y dejarlo reposar por 30 minutos. Ambas pastas deben retirarse con agua fría.
Semillas de granada
Este es un reconocido ingrediente antienvejecimiento y su aceite rico en fitonutrientes, muy efectivo en la recuperación de la firmeza en la piel, en particular, la de los senos si se aplica en masajes diarios.
También se puede utilizar en una pasta de cáscara de granada y un poco de aceite de mostaza caliente y con ella se realizan movimientos circulares en los senos de 5 a 10 minutos, antes de dormir.
8.- Aloe Vera
Las propiedades naturales y antioxidantes en el aloe vera previenen los daños causados por los radicales libres y ayudan a reafirmar los senos caídos.
Aplicarlo en el busto y masajear suavemente con un movimiento circular durante 10 minutos, dejarlo reposar por otros 10 minutos y luego lavarlo con agua tibia, es una buena rutina -de 4 o 5 veces por semana- para ganar firmeza.
Con información de: www.elciudadano.com